El pasado 19 de diciembre, Abre los ojos, la segunda película de Alejandro Amenábar, tras la impactante Tesis, cumplía 23 años
Una película para el recuerdo que dejó momentos que ya son historia del cine patrio. Desde el hecho de que el director tenía solo 25 años, a aquel maravilloso trío protagonista que formaron Eduardo Noriega, Najwa Nimri y Penélope Cruz.
Ahora, si hubo una escena legendaria en Abre los Ojos, fue la que protagoniza César (Noriega), en una absolutamente desierta Gran Vía madrileña.
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Una secuencia que es magia pura pero que dio más de un quebradero de cabeza a dirección y producción, bien se podría haber grabado este 2020, cualquier día del confinamiento.
La secuencia de la Gran Vía vacía se rodó 10 meses antes que el resto de la producción. El Ayto. de Madrid solo nos permitió rodar la madrugada del 15 de agosto del 96, así que sin arrancar la preproducción y sin equipo aún, rodamos esa icónica secuencia. #Amenábar #AbreLosOjos https://t.co/IWCP1FGTQz
— Eduardo Noriega (@Norihouse) December 19, 2020
Eso sí, esto ocurrió el 15 de agosto de 1996, cuando el equipo de rodaje aprovechó el Puente de la Paloma y la salida masiva de madrileños a zonas con playa para hacer la grabación.
"La secuencia de la Gran Vía se rodó 10 meses antes que el resto de la producción. El Ayuntamiento de Madrid sólo nos permitió rodar la madrugada del 15 de agosto del 96, así que sin arrancar la preproducción y sin equipo aún, rodamos esa icónica secuencia", ha recordado Eduardo Noriega en Twitter.
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El resultado no pudo ser más satisfactorio. Y eso que, como contó Emiliano Otegui a ABC, esta escena se rodó en precarias condiciones, con cuatro personas, un megáfono y 20 amigos del instituto del hijo del propio integrante del equipo de producción.
Salto al vacio es brutalllll y con una banda sonora acojonante.
— Juanma Muñoz (@09Mugon) December 19, 2020
Recuerdo que la polí solo paraba el tráfico(aún así recuerdo los atascos y pitidos de protesta), pero los que intentabais parar a los peatones pasasteis malos ratos, gente que iba a trabajar (los menos), gente que salía del after... "¡A mí no me paras, la calle es de todos!".
— Eduardo Noriega (@Norihouse) December 19, 2020
Del plano mítico de la grúa en la Gran Vía, se hicieron creo tres,se nos acababa el tiempo,la gente indignada, y la policía nos echaba. La 1ª falló cámara,en la 2ª una nubecita repentina nos tapó el sol.Nos calleron 4 gotas, y 3ª quedó para siempre, con el suelo mojado, perfecta.
— Eduardo Noriega (@Norihouse) December 19, 2020
Tremendo. Cuánta tensión y menudo desasosiego sentiríais al “corten!”
— Ignasi Guasch (@IgnasiGuasch) December 19, 2020
— Eduardo Noriega (@Norihouse) December 19, 2020
Debía ser una broma, pues en el coche hay primeros planos de mi personaje. De hecho, yo viví meses emocionado sabiendo que tenía un peliculón por hacer. Por las enormes dificultades para lograr esa sec, nunca se repetiría, ya no me podrían echar.
— Eduardo Noriega (@Norihouse) December 19, 2020
Ahora que mucha gente va a tener más tiempo del que esperaba en Navidad, a lo mejor es buen momento para recuperar un clásico patrio del cine de los 90, en vez de volver a ver Ben-Hur o Qué Bello es Vivir.
Por cierto, para el recuerdo queda también las 10 nominaciones que la película tuvo a los Goya para llevarse un total de cero cabezones. La Academia y sus cosas.
Fotos: Abre los Ojos