Cara Delevingne, Kendall Jenner y el selfie prohibido del Met
Cara Delevingne, Kendall Jenner y el selfie prohibido del Met

La premisa era clara: nada de selfies en la Gala del Met. Una sorprendente norma dictada por la organización del evento con el apoyo de Anna Wintour cuyo objetivo tenía que ver con el control de la información del evento; con la insólita idea de que, este año, todo lo que pasase dentro del Museo Metropolitan de Nueva York (y en su escalinata) fuese contado únicamente por voces oficiales y no por un sinfín de móviles publicando fotos al unísono a través de las redes sociales. Por eso mismo, el uso de teléfonos y de cámaras fotográficas quedaba terminantemente prohibido.

Pero, ¿para qué están las reglas? Pues para romperlas, por supuesto. Y eso es lo que hicieron Cara Delevingne, Kendall Jenner y compañía en cuanto tuvieron oportunidad. Con las más guapas: Bella Hadid (la hermana pequeña de Gigi), Jourdan Dunn, Behati Prinsloo, Emily Ratajkowski, Lily Donaldson, Joan Smalls y Zoe Kravitz acompañadas del diseñador Alexander Wang, amigo íntimo de toda it girl que se precie.
La reacción de Kim Kardashian en Instagram
Pero ellas no fueron las únicas que se saltaron la prohibición de hacer fotos para Instagram. A lo largo de la noche, Kim Kardashian compartió todas las imágenes que quiso y más con sus 31,5 millones de seguidores. ¿La más espectacular? Esta foto en la que se le puede ver de espaldas recorriendo el pasillo de entrada del museo junto a Jennifer López, ambas luciendo curvas perfectas, colas de infarto y escotazos traseros. ¡Y nos lo queríamos perder!
También durante la cena, Kim estuvo subiendo fotos a IG. Con Madonna, con Cher... todos ellos momentos de estilo y fama inolvidables; tal y como manda la tradición de este tipo de eventos desde que las redes sociales son redes sociales. A esto hay que sumarle las fotografías de making of de Alexa Chung, la blogger italiana Chiara Ferragni, Diane Kruger o las propias firmas de belleza y moda como Marc Jacobs Beauty o Diane Von Furstenberg. ¿Qué opinará la editora jefa de Vogue USA de todo esto?
Redes sociales: la polémica está servida
Lo de la Gala del Met no es sino un pequeño (o enorme) ejemplo de una situación de desconcierto comunicativo que ya lleva forjándose un tiempo. Y es que, ahora que todo el mundo tiene un perfil en Instagram o en Twitter, donde puede decidir qué comparte y, sobre todo, cómo lo comparte, los medios de comunicación tradicionales pasan a un segundo plano a la hora de informar sobre este tipo de acontecimientos; sobre todo cuando hay muchas celebridades con muchos followers de por medio.
Ya ha pasado en fiestas, en desfiles e incluso en eventos tan multitudinarios como el Carnaval de Rio de Janeiro 2015, donde la publicación de selfies por parte de los participantes en el desfile se penalizó con una pérdida de puntos en las votaciones finales. Eso sí: si algo está claro, es que la censura no es la solución. Principalmente porque es imposible controlar el uso de los teléfonos móviles de cientos de invitados y, al final, el mero hecho de vetar algo hace que el ingenio se dispare (y de manera instantánea, tal y como hace la cámara de fotos del móvil) para burlar los posibles controles.
Fotos: Instagram